El huracán Melissa, formado como tormenta tropical el martes pasado en el mar Caribe, ha alcanzado la categoría 5, según el Centro Nacional de Huracanes (NHC, en inglés) de Estados Unidos, que prevé vientos destructivos, marejada ciclónica e inundaciones catastróficas que empeorarán en Jamaica durante el día y hasta esta noche. (EFE).
Jamaica comenzó a sentir el domingo los efectos del amplio campo nuboso del huracán Melissa, que en horas de la mañana del lunes se intensificó a categoría 5 y amenaza con convertirse en uno de los fenómenos más destructivos que haya enfrentado el país en décadas.
Aunque no se espera un impacto directo hasta la noche del lunes o la madrugada del martes, las autoridades meteorológicas advierten que la isla podría experimentar lluvias torrenciales, marejadas ciclónicas y vientos huracanados desde este fin de semana.
Durante una rueda de prensa en la Casa del Gobierno, el director del Servicio Meteorológico de Jamaica, Evan Thompson, informó que el huracán ya ha comenzado a provocar ráfagas y lluvias en distintas zonas del territorio. Señaló que Melissa, que ha permanecido casi estacionaria en el Caribe durante varios días, inició un proceso de intensificación acelerada y avanza lentamente hacia el norte, con una trayectoria que podría llevar su centro a cruzar entre el este y el sur de la isla, para luego dirigirse hacia la provincia de Clarendon.
El funcionario explicó que el país tiene por delante al menos tres días de movimiento del sistema antes del posible impacto directo. Durante ese período, agregó, se esperan precipitaciones acumuladas de entre 20 y 30 pulgadas —entre 500 y 760 milímetros—, una cantidad que calificó como sin precedentes en la historia reciente de Jamaica. Advirtió que tales niveles de lluvia podrían provocar inundaciones extensas, crecidas de ríos y deslizamientos de tierra en todo el territorio nacional.