El mandatario derechista grabó un vídeo enfatizando que “estamos construyendo una nueva historia”. En el registro una voz celebra el surgimiento de un nuevo país “verdaderamente libre y soberano”. El oficialismo tomó el control de congreso y agrava la crisis política en el país centroamericano.
Bukele respondió las críticas asegurando que mantendrá la sustitución de funcionarios. El gobernante escribió en Twitter que “el pueblo no nos mandó a negociar. Se van. Todos”. Los organismos de derechos humanos, Naciones Unidas (ONU) y la Organización de Estados Americanos (OEA) mantienen las alertas.
El sábado no pasó ni una hora desde que los diputados de su partido, Nuevas Ideas, tomaron posesión de los escaños para la primera jugada sábado. De forma inmediata removieron del cargo a los jueces que algún día se enfrentaron a Bukele. La acción le trajo criticas incluso desde la Unión Europea (UE).
El titular de la política exterior de la UE, Josep Borrell, dijo estar “preocupado” por el funcionamiento del estado de derecho y la separación de poderes. La vicepresidenta de EEUU, Kamala Harris, defendió la importancia de “un poder judicial independiente”. La Casa Blanca incluso le manifestó sus “serias preocupaciones”.
El secretario de Estado, Antony Blinken, habló con el propio Bukele para expresar la opinión de Washington. El relator especial de la ONU, Diego García-Sayán, condenó los intentos para “debilitar la independencia judicial”. Human Rights Watch criticó a Bukele “por continuar deteriorando la frágil democracia”.
El País informa que según Bukele está inmerso en lo que llama “limpiar la casa”. Por eso también sacó a un grupo de jueces de la corte suprema e intenta concentrar el poder. Las destituciones son el siguiente paso después de sus agravios contra magistrados y diputados opositores. Fuente:msn
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