Gabriel Peña, vecino de la pareja, contó que cuando escuchó los gritos de la mujer y sus hijos, corrió para romper el candado de la casa y sacarlos. Ya el agresor había huido.
Peña precisó que Ubrí agarró un extremo del colchón y lo incendió con los niños y la mujer dentro de la casa, para luego encerrarlos con candado y huir.
"Papi no nos mates...", dijo la vecina Oliva Peña que gritaban los niños de dos, siete y once años ante la acción de su padre.
Precisó que la pareja llevaba cerca de tres años en conflictos permanentes, por lo que no le sorprende la actitud de Ubrí, de quien dijo siempre actuó de forma agresiva.
Los esfuerzos por sofocar el incendio fueron vanos, por lo que las ocho viviendas quedaron casi inservibles.
La Policía mantiene activa la búsqueda del agresor, mientras los testigos dicen que huyó a Elías Piña porque su familia reside allá.
Este hecho ocurre dos días después de que un hombre asesinara a su ex pareja, la madre de ésta, una hermana y una niña de dos años en Invivienda.
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