Fue sometido a la justicia un hombre acusado por el Ministerio Público de haberle inyectado una sustancia a un joven pelotero de 17 años a quien posteriormente le fue amputada la pierna derecha, el pasado mes de noviembre.
El imputado es Daniel Rodríguez, alias Salomé, de aproximadamente 43 años de edad. A este le fueron impuesto tres meses de prisión preventiva en la cárcel de cárcel pública de El Seibo.
De acuerdo con el informe de la Procuraduría General de la República, al adolescente, cuyo nombre se omite por razones legales, le habría sido inyectada una sustancia para caballo, presumiblemente esteroide anabólico. Las investigaciones establecen que la misma sustancia también había sido inyectada a un hermano de éste de 15 años y a un amigo, éste último quien habría convulsionado después de recibir una dosis del producto.
De acuerdo a evidencias obtenidas en el transcurso de las pesquisas, Rodríguez habría cobrado la suma de RD$5,000 al joven, los cuales serían utilizados para comprarle una vitamina para mayor rendimiento como pelotero. Indica que luego de recibir el medicamento, que le inyectaba cada dos días, le provocaba una sudoración excesiva por las noches y calambres en las piernas terminando en una desgracia mayor para el joven.
El menor luego de ser llevado a varios centros de salud de la región Este y el Distrito Nacional, finalmente fue ingresado el pasado 23 de noviembre en el Hospital Moscoso Puello, donde le fue realizada la amputación del miembro inferior derecho.
La víctima habría sido ingresada al hospital con fiebre, con aumento del volumen de varios miembros inferiores, cianosis plantar y ausencia de pulsos infrapaterlar.
Una advertencia para los entrenadores
El procurador general de la República, Jean Rodríguez, advirtió a las personas que se dedican a entrenar jóvenes, que actuará sin contemplaciones ante este tipo de hechos, que además de constituir una infracción penal, ponen en juego la vida de los jóvenes. Señaló que es la primera vez que se logra levantar evidencias y obtener medidas de coerción con prisión en una práctica criminal que tiene años desarrollándose y que le ha llegado la hora de detenerse y ser sancionada. fUENTE:DIARIOLIBRE
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